
IV
Él no sintió que el cuerpo iba quedando
duro, de piedra solitaria y fría.
No comprobó que el corazón dormía
y que la última sed se iba apagando.
Pero allá, en algún sitio, suplicando
se oyó su muerta voz que repetía
que aceptaba morir, pero quería
salvar lo que se estaba marchitando.
Salvar la pobre carne de la muerte,
rescatar del gusano aquellas manos
y el niño corazón que tanto amara.
Pero estaba jugada ya su suerte:
era el precio que pagan los humanos.
Porque la vida siempre sale cara.
José Luis Martín Descalzo (Madridejos, Toledo, 27 de agosto de 1930- Madrid, 11 de junio de 1991) fue un sacerdote, periodista y escritor español.