Titiritero tiene
pecho de luna,
estrellas en las manos,
dedos de plumas.
Cuando la noche duerme
al titiritero,
las marionetas bailan
en su sombrero…
Y acarician su pelo
con luz de luna,
para que no le falte
amor de ninguna.
Dentro de su baúl
caben los sueños,
la risa de los niños
y los abuelos…
Y, aunque titiritero
tiene sus huesos
cansados de trotar
por caminos viejos,
levanta cada día
sus ilusiones
llenas de globos
con forma de corazones.
de «Algodón de caramelo y cuentos garrapiñados»
Isabel Bermejo, nací en Ceuta en 1964, y allí pasé mi infancia y primera juventud. Desde muy pequeña, me apasionó leer y escribir. Más tarde, me instalé en Granada, donde me licencié en Filología Española. He escrito, sobre todo, Poesía, el género que más me ha tocado de cerca, y del que soy lectora voraz y permanente. También, relatos breves. Y Poesía y Cuentos infantiles.