Aquí estoy.
El trayecto se complica. Todo es duro
cuando la noche ya no es cordial.
Los elementos, hostiles,
me aterran y la gente
que estuvo a mi alrededor guiándome,
de repente, no están más.
Cuando no puedo volver atrás
porque ya no hay amparo
y el camino
sólo tiene un sentido.
Cuando nada parece tenerlo…
Ya no tengo dónde regresar,
ni unos brazos entrañables
me esperan con tristeza, para curar heridas
que dejaron las zarzas.
Cuando el camino
va fundiéndose al paso,
constantemente devorado por monstruos.
E iré conociendo la implacable
conformidad pasiva,
la aventura
hacia la noche terrible, inaplazable,
hasta el confín del mundo
donde todo desaparece en la profunda sima.
La tierra no es amable.
Seguiré, qué remedio, hacia el abismo,
qué más podría hacer…
¿Inventarme planetas?
Hasta que encuentre belleza
y una paz blanca, triste,
en saltar al vacío
… … …
Carlota Figueroa, poeta, escritora y artista plástica española (Ripoll, Girona, 1958).