si ya lo sé
si soy la lagartija que cruje
bajo el orbe
el tenso escarabajo que palpita
sostengo con mi miedo la tormenta
qué no voy a saber si estoy desnuda
en esta llaga
y el el aro del pecho
me imprime la vida su cornada
su blanco puñetazo
que no se me abandone
yo voy a la estación, a alguna parte
a clavar con fe los incisivos
a hurgar con dulce hambruna
la filigrana testaruda del deseo
la telita jodedora del que ama
y ya no puede contenerse
y es un jarrón de flor desesperada
si ya lo sé
que no me digan de nuevo la desdicha
quiero tomar un barco, un beso
una medida
una pomada nueva
zurcirla a la matriz con esperanza
tomar a mi varón, sobre su sexo
depositar esta vagina enamorada
esta vulva hecha del higo de los vértigos
y ser el más estrecho brazalete
mirar esa fiereza que se funde
y es esta hilacha tibia
saliva del destino
espuma del esperma
donde escucho a mi hijo que me llama
quiero tomar un barco
dejar que me hable el mar por este sexo
que se ha puesto de pie
para preñarme
que su espuela de miel
en las entrañas
me ponga un ser del musgo
yo voy a la estación, a alguna parte
adonde salen a parir los ciervos hembras
ese sueño bruñido que les brilla
como un cristal creciente
a pesar de los pesares y los hombres
y del dolor morado de este mundo
quiero tomar un hijo, tener un barco
tomar un barco
a ellas como a mí
que nos manche la vida y su promesa
con su baba de estrella
en los ijares
Ana Istarú, poeta y actriz costarricense nacida en San José en 1960. Guiada por sus padres, inició muy joven la carrera literaria publicando su primer libro de poemas a los quince años. Junto a Eunice Odio y a Carmen Naranjo, stá considerada como una de las figuras más prominentes del panorama literario de su país, con reconocimientos internacionales como los premios españoles María Teresa de León para autoras dramáticas en 1995 y el premio Hermanos Machado de Teatro en 1999. En 1990 le concedieron la beca de creación artística de la Fundación Guggenheim. De su obra poética se destacan: Palabra nueva en 1975, Poemas para un día cualquiera en 1977,Poemas abiertos y otros amaneceres en 1980, La estación de fiebre y otros amaneceres en 1983, La muerte y otros efímeros agravios en 1988, Verbo madre en 1995 y Poesía escogida en 2002.